Vaya por delante que 4 días después de tu desaparición te di por muerto pero aun así, espero que estés vivo y bien o que una familia, una asociación, protectora o colonia te acogiese y lograse que no murieras envuelto en dolor, por que sí, desapareciste anciano y muy enfermo, una enfermedad que antes acabo con tu sobrino, dolorosa y lenta. Te buscamos, pusimos carteles, publicamos en RRSS personales y grupos pero nada. Hasta que un día vi una foto de alguien que te había encontrado. En seguida me puse en contacto pedí ubicación, estado, sexo,... coincidías en (casi) todo y fuimos al lugar en el que te acogieron, contentos porque a esas alturas ya todos te dábamos por finao. Pero no eras tu, los colores, los patrones del pelaje, la cara de culo... pero no eras tu. La gente que le rescato y nosotros vimos nuestra esperanza desvanecerse. Acariciamos a ese gato, preguntamos por su historia e intentamos darle unas golosinas (desde que lo encontraron no comía ni bebida). Al día siguiente