LA ESPERPÉNTICA
Ella es gorda. Viste siempre embutida con blusas brillantes y minifaldas de infarto. Tiene el cabello seco, estropeado y teñido de un rubio que le hace ver la melena desaliñada. Calza kilométricos tacones metálicos. El maquillaje parece mas una caracterización para películas de terror de serie B que una táctica embellecedora.
La gente murmura y se inventa su vida, indignados porque su aspecto estrafalario no concuerda con sus prejuicios. Ella pasa a su lado sin darles importancia, saluda a todos con la educación que no le devuelven y los mira con un respecto básico que le cambian por un profundo desprecio.
Se hecho un novio, se caso y tuvo un hijo. La gente no paraba de preguntarse como consiguió a alguien normal, a un hombre con un aspecto 0 sospechoso, tan guapo y extrovertido.
Los varones le compadecen (no es una mujer presumible) y envidian (casi todos trataron de acostarse con ella y nunca se recuperaron del NO que recibieron por respuesta) y las féminas no le perdonan el fijarse en la de mala reputación (¿es que no ve sus pintas? ¿Qué su reserva y educación solo demuestra que es una mosca muerta?) aunque no lo conocían de nada hasta que vino a vivir con la esperpéntica.
Ellos tiene buenos trabajos, amigos, el niño es sano, simpático y muy inteligente; les gusta pasar todo el tiempo en familia. Y lo que mas odian: se les ve encantados de ser estar los tres juntos.
¿Y los demás? Pues se reúnen tras ellos y sueltan todo su veneno. No soportan que ella no se esfuerce por hacerse gustar pero tenga una familia como la que ellos anhelan.
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